Piedras preciosas
 

Gemas Inorgánicas


De sobra es conocida la atracción que las piedras preciosas han ejercido sobre el ser humano a lo largo de la historia. Entre todos los usos que el hombre a dado a las piedras preciosas, destaca la utilización de las mismas como símbolo de poder.


Las piedras preciosas más importantes son el diamante, el rubí, el zafiro y la esmeralda.


El diamante es sin duda el rey de las piedras preciosas. Posee el mayor grado de dureza, el más alto índice de refracción y la más pura transparencia. Los grados de apreciación en los diamantes de joyería se basan tanto en el color como en la pureza, siendo el más perfecto el de la más limpia transparencia. Sus principales centro de extracción se encuentran en Sudáfrica.



Los rubíes más apreciados son los procedentes de Birmania, a causa de su color rojo oscuro brillante con una tonalidad púrpura conocido como “sangre de pichón”. Pertenece al igual que el zafiro al grupo del corindón. Los yacimientos mas importantes se encuentran en Brimania, Thailandia, Sri Lanka y Tanzania.




El zafiro está considerado como la más valiosa de las piedras preciosas si exceptuamos el diamante de óptima calidad. El matiz de cada zafiro es el mejor indicativo de su origen. Los de Birmania son de un azul intenso, más claros y muy apreciados por su escasez los de Cachemira y los de Ceilán tienden al violeta.




La esmeralda es la piedra preciosa que primero se usó en joyería.  Su color es verde, siendo las más valiosas las de color verde aterciopelado muy oscuro. Las esmeraldas sin imperfecciones son muy raras y la mayoría contienen inclusiones conocidas como el “jardín” de la esmeralda. Las mas apreciadas son las procedentes de Colombia.